Introducción
Los escorpiones o alacranes (según los nombremos con sus nombres de raíz latina o árabe respectivamente) se encuentran entre los animales que más accidentes con impacto toxicológicocausan en el mundo (Kathabi et al. 2011). Delas 21 familias de escorpiones existentes, solounos pocos géneros poseen especies toxicoló-gicamente peligrosas para los seres humanos (Figura 1). Se estima que anualmente hay al menos 1,5 millones de envenenamientos con 2.600 muertes (Chippaux 2012). Los escorpiones son conocidos desde la antigüedad en las diferentes culturas y civilizaciones, posiblemente porlas características tóxicas de su veneno. Fueronlos primeros animales marinos que conquistaronla superficie terrestre y habrían evolucionado apartir de ancestros marinos de gran tamaño, llamados euriptéridos (Polis 1990; Brownell y Polis2001; Stockmann e Ythier 2010). Desde que seadaptaron a la vida terrestre, se han distribuidoampliamente encontrándoselos en toda la superficie del planeta, con excepción del Polo Norte yla Antártida, hallándoselos incluso en cumbres,hasta 4910 m de altura (Ochoa et al. 2011). Seadaptaron a los ambientes más diversos comodesiertos, sabanas, estepas, hábitats rocosos,bosques templados, foresta tropical, forestaatlántica, matorrales, costas, montañas, forestade altura, cavernas, medios agrícolas y mediosantropogénicos (Stockman e Ythier 2010). Nosolo son animales muy plásticos en cuanto a losambientes que pueden colonizar sino que sonmuy resistentes a condiciones adversas como elayuno y las grandes variaciones de temperatura,inclusive son extremadamente resistentes a lasradiaciones ionizantes, siendo de los muy pocosanimales que pudieron sobrevivir a explosionesatómicas (Goyffon y Roman 2001; Goyffon y Ro-man 2014). Lo descripto previamente brinda unaidea de la dimensión de la dificultad que planteasu combate y control.
Por el riesgo que representan para la salud humana, y siendo su erradicación imposible e inviable, es necesario el control de sus poblaciones a finde disminuir el número de accidentes y consecuentemente, la morbimortalidad (Ministério daSaúde 2009).
Su muy amplia distribución, adaptabilidad y capacidad sinantrópica (capacidad de adaptarse a condiciones ambientales creadas o modificadaspor la actividad humana) y partenogenéticas (capacidad de las hembras de dar progenie sin lanecesidad de ser fecundadas), facilita su contactocon el hombre, si bien en la enorme mayoría delos casos no genera problemas sanitarios. De lascerca de 2000 especies de alacranes conocidasen el mundo, solo unas 30 representan un riesgosanitario toxicológico, dado que sus venenos poseen toxinas capaces de afectar a los mamíferos,pudiendo causar envenenamientos sistémicos, eincluso la muerte de seres humanos (Khattabbiet al. 2011).
La mayor cantidad de accidentes y óbitos en el mundo son causados por escorpiones de la FamiliaButhidae (Chippaux y Goyffon 2008; Khattabi etal. 2011). Dentro de éstos, en América los génerosTityus (América del Sur) y Centruroides (Américadel Norte) son los responsables de la mortalidadpor alacranes (Büchler 1971). En África se destacansanitariamente los géneros Androctonus, Buthusy Leiurus en el norte (estos últimos también enMedio Oriente) pudiéndose mencionar además,aunque con menor peligrosidad hasta el momento, a los géneros Hemiscorpius, Buthacus, Neboy Odontobuthus en el centro y en el sur de Áfricalos géneros Parabuthus y Buthotus. En Asia losresponsables de envenenamientos son escorpiones de los géneros Androctonus, Hotentotta(Mesobuthus) y Heterometrus, siendo el últimode menor peligrosidad que los dos anteriores.Estos géneros no son los únicos, pero si los principales productores de accidentes en el mundo,ocasionalmente con óbitos por envenenamiento(VAPAGUIDE 2016) {Figura 1).
Debido a su capacidad de habitar diferentes y muy diversos ambientes, los Tityus así comomuchas otras especies de escorpiones, se hanadaptado muy bien a la vida sinantrópica, dadoque en viviendas humanas poseen disponibilidadde alimento, temperatura, humedad adecuadasy en general ausencia de predadores. De hecho,en Argentina algunas especies, como Tityus (T.)trivittatus, son difíciles de hallar en lugares norelacionados a la actividad y construcciones humanas. Otras, como T. confluens, T. bahiensis yT. serrulatus también llegan a adaptarse muy biena la vida sinantrópica (FUNASA 1999; Ministérioda Saúde 2009; Ministerio de Salud 2011) (Figura 2). Esto aumenta la importancia sanitaria deestos escorpiones debido a la toxicidad de susvenenos y a la mayor posibilidad de su contactocon humanos.
En Argentina T. trivittatus se halla mayormente relacionado con edificios o túneles, hecho ya conocido y citado por Maury (1970, 1997) y otrosespecialistas (Acosta 2005; Ojanguren-Affilastro2005) en concordancia con datos de estudiosepidemiológicos realizados en relación a estosescorpiones (Salomón y de Roodt 2001; Las-kowicz et al. 2011; Blanco et al. 2012, 2016; deRoodt 2014). Se los encuentra mayormente enconstrucciones antiguas, preferentemente en loslugares cálidos y húmedos, asociados a grietasen las paredes, túneles para cañerías de agua yvapor, cámaras de electricidad y calderas, cañerías varias inhabilitadas o en uso (recordar quepueden resistir bajo el agua tiempos considerablemente largos), abajo de pilas de materiales endesuso, macetones, bajo pisos con cámara deaire, etc. A estas condiciones que favorecen su supervivencia, se suma lo inherente a sus características partenogenéticas y su gran resistencia a condiciones ambientales adversas.
El escorpionismo en el mundo se ha hecho más notorio en los últimos años (Khattabi 2011; Chippauxy Goyffon 2008) y en Argentina es el accidentepor animales venenosos que más es comunicado a las autoridades sanitarias (de Roodt 2014;Blanco et al. 2016; de Roodt et al. 2017). Paraafrontar este problema, independientemente dela adopción de medidas tendientes a prestar unaadecuada atención médica a quienes sufran envenenamiento escorpiónico, deben tomarse lasmedidas preventivas para evitar que sucedan.Entre las numerosas medidas sugeridas para evitarlos accidentes escorpiónicos, siempre surge comoun punto importante el de “cómo combatirlos”.Ante esta pregunta en los medios de divulgaciónmasiva, se sugieren numerosísimas formas dehacerlo, lamentablemente no todas correctas eincluso algunas de ellas pueden incrementar elriesgo de contacto humano-escorpión y consecuentemente de accidentes.
Por este motivo, presentamos los métodos conocidos para el control de escorpiones, brindando así información con base técnica científica quepuede ser utilizada para una planificación racionalde su control en general y de los Tityus en particular. El fin de esto es facilitar elementos para elcontrol de escorpiones, comprobados, de utilidadpara disminuir la posibilidad de ocurrencia deenvenenamientos, más que la eliminación físicade las poblaciones de escorpiones.
Alacranismo en ArgentinaEn Argentina los escorpiones que han causado muerte de humanos son T. trivittatus y T. confluens (Figuras 2.a y 2.b) siendo el primero el másampliamente distribuido de todos los Tityus deArgentina (Ojanguren-Affilastro 2005) y el responsable de la mayor cantidad de muertes por escorpionismo (Piola et al. 2006; de Roodt et al. 2017).Tityus confluens se encontraba mayormente enel norte de Argentina, sin embargo ha ampliadosu distribución en el país habiéndose incluso registrado un accidente en Bahía Blanca, en el surde la provincia de Buenos Aires sobre el paralelo38, incluso se registraron hallazgos en la ciudadde Buenos Aires y en el conurbano bonaerense(Ojanguren et al. 2019). Estos no son los únicos
Tityus capaces de provocar envenenamientos, ya que existen, al menos, otras dos especies potencialmente peligrosas: Tityus bahiensis (Figura2.c) cuya presencia es conocida en el país desdehace años y T. serrulatus (Figura 2.d) del que sehalló un ejemplar en la provincia de Corrientesen el año 2000 y otro recientemente en Misionesen el año 2019 (de Roodt et al., 2019), siendoesta especie el escorpión de mayor importanciamédica en Brasil (FUNASA 1999).
Cuando nos referimos al “control” de las poblaciones, nos referimos a mantenerlas en un nivel en el que no representen un riesgo sanitario, no aeliminarlos, ya que esto, además de ser éticamente inaceptable desde el punto de vista biológico,en el caso de los escorpiones sinantrópicos escasi imposible. Todas las medidas de “control”deben basarse primariamente en impedir el contacto “hombre-escorpión” y en tratar de que laspoblaciones no aumenten y se mantengan en unnivel que represente el menor riesgo posible parala población humana.
Debido a las características sinantrópicas de algunos Tityus, en especial T. trivittatus, en lasgrandes ciudades el control de sus poblacionesse torna complicado. En estos casos las medidas que comúnmente se toman para el controlde artrópodos en diferentes tipos de edificaciones no representan, adoptadas individualmente, una solución definitiva (Ministério da Saúde2009; Ministerio de Salud 2011). Estos métodosde control podrían dividirse en búsqueda activa,captura, control químico, control mediante predadores naturales e implementación de medidasedilicias. Todas pueden ser de utilidad, pero enlas ciudades grandes, algunas de ellas puedenser inaplicables o incluso contraproducentes aumentando la probabilidad del contacto humano- escorpión.
Por ejemplo, la búsqueda activa y la captura, no serían de mucha utilidad cuando los alacranesestán ocupando viviendas o grandes edificios.En estos casos su hallazgo puede tornarse imposible a causa de las características edilicias yarquitectónicas de las construcciones urbanasy debido a la ubicuidad de los escorpiones. Elcontrol químico tampoco brinda soluciones enestas situaciones, si bien podría ser de utilidaden poblaciones de escorpiones no sinantrópicaso en poblaciones sinantrópicas que ocupan edificaciones rurales de menor complejidad que lasde las grandes ciudades. Hasta el presente, elcontrol químico no demostró ser una solución alargo plazo (Ministério da Saúde 2009; Ministeriode Salud 2011).
En el caso de algunos escorpiones, la introducción de predadores naturales ha tenido un cierto éxito, pero es de poca utilidad en las grandesciudades con escorpiones como T. trivittatus oT. confluens. Otra posibilidad que debería aplicarse en todos los casos, es la implementaciónde medidas arquitectónicas, dependiendo de lasdiferentes situaciones, para evitar el contacto humano - escorpión, impidiendo su ingreso a laszonas edilicias habitadas por los seres humanos.La ya comentada resistencia de los escorpiones,sus características anatómicas que le permiteningresar y circular por espacios muy reducidos,junto a algunas características fisiológicas como las de poder cerrar sus estigmas respiratorios y soportar la inmersión en agua, limitan lasposibilidades de su control en condiciones desinantropía. Por todos estos motivos, el controlde los escorpiones sinantrópicos, como el casolas especies de Tityus, debe centrarse en evitarel contacto entre los escorpiones y los humanos y en la reducción del número de escorpionescuando esto es posible, enfocándose en el usode medidas combinadas.
Control químicoUso de agentes químicos para combatir a los escorpiones
El empleo de agentes químicos es una de las medidas más adoptadas para el control de losartrópodos, y es una de las más utilizadas para combatir escorpiones (Novaez Ramírez et al.2011). Es además de las más preconizadas enlos ámbitos relacionados con el “control de plagas”, e incluso a veces, lamentablemente, recomendado por instituciones oficiales. Se hanusado y usan drogas muy variadas, siendo lasprincipales, los piretroides solos o combinadoscon organofosforados o con carbamatos. Sin embargo, la bibliografía con base científico-técnicaque demuestre la efectividad del control químicopara el control de los alacranes sinantrópicos esbastante escasa. Existen pocos estudios publicados al respecto y los resultados de muchos deestos trabajos no son concluyentes. Dentro delos pocos que se han realizado, pueden citarselos estudios iniciales de Ezequiel Dias en Brasil(Dias et al. 1924), en el que probaron diferentesdrogas experimentalmente, observando acciónsobre estos arácnidos, pero indicando que la fumigación no debe tomarse como la solución paraeste problema. Hasta el presente, este conceptose mantiene sin modificación alguna, a punto tal,que las autoridades sanitarias de países en dondeel escorpionismo es muy importante, con características similares a las de Argentina, descartan elempleo de agentes químicos para la eliminaciónde alacranes (Ministério da Saúde 2009).
Las principales medidas de control en localidades donde naturalmente habitan los escorpiones y endonde se los considera un riesgo serio para lasalud, como por ejemplo en muchas regiones deMéxico, consisten en la fumigación intra y extradomiciliaria, que pueden realizarse en algunostipos de ambientes ediliciamente muy simples yhabitados por humanos. Sin embargo, los estudiosson escasos para el combate de escorpiones engeneral e inexistentes para el caso de T. trivittatusy/o T. confluens en particular.
Las características biológicas de los Tityus en general y en este caso de T. trivittatus en particular, tornan el “combate” químico muy dificultoso y lapoca experiencia con base científica disponibleno indica buenos resultados mediante esta metodología. En México, un país con una enormeexperiencia en el combate de escorpiones, secontempla el control químico, pero como un accesorio a otras medidas para su control (Secretaríade Salud 2002). Recomiendan que se fundamenteen estudios que sustenten la susceptibilidad delos alacranes a los agentes empleados para sucontrol. Entre las drogas recomendadas mencionan a la lambdacialotrina (0,8% en suspensióny en dosis de 0,03 g/m2) que es un insecticidasintético y la ciflutrina (0,04 a 0,08 g/m2), ambascon residualidad aproximada de seis meses. Como segunda posibilidad, sugieren los carbama-tos como bendiocarb (20 mg/m2) o propoxur (30mg/m2), ambos con residualidad de 6 meses.Recomiendan el rociado focalizado en el interiory exterior de la vivienda y anexos (Secretaría deSalud 2002). Sin embargo, hay que recordar queno solo las especies de escorpiones de importancia médica en México son diferentes (todaspertenecen al género Centruroides), sino que lostipos de construcciones en que suele fumigarseno son similares a los ambientes en los que enArgentina suelen habitar los Tityus, en especial enlas ciudades, en dónde más se los encuentra (deRoodt 2014; Blanco etal. 2016). Los Centruroidesen México suelen encontrarse mayoritariamenteen viviendas rurales o en unidades habitacionalessencillas. En Argentina los Tityus de mayor importancia sanitaria suelen hallarse en ambientesurbanos, en edificaciones mucho más complejas(por ejemplo en edificios y construcciones grandes), esto dificulta que cualquier sustancia química que se utilice entre fácilmente en contactocon los alacranes debido a la ubicación que estospueden lograr en estos tipos de construcciones.
En Chalcatzingo, México, el combate químico utilizando piretroides no mostró un efecto beneficioso a largo plazo. Allí utilizaron bifentrina,ciflutrina, y deltametrina, con los que fumigaronen tres oportunidades, utilizando concentraciones de 35 a 55 mg por m2 (Ramsey et al. 2002).Debe mencionarse que Chalcatzingo es una zonaarqueológica en el estado de Morelos, que a lafecha del estudio no superaba los 2500 habitantes y que los escorpiones Centruroides tienendiferente historia natural respecto a los Tityus. Sibien el uso de altas dosis de piretroides redujo lacantidad de Centruroides y Vaejovis (Scorpiones:Vaejovidae), no llegó a eliminarlos, justamente porla dificultad para alcanzar todos los refugios conlos productos (Ramsey et al. 2002). Esto da ideade la dificultad para llegar con los productos enpor ejemplo, edificios de departamentos, hospitales, edificios públicos, etc. El uso de fumigacióncon productos químicos podría ser de utilidadpara disminuir las poblaciones de escorpionescuando son muy numerosas (Spirandeli Cruz etal. 1995), sin embargo, las fumigaciones no llegana eliminar a las especies sinantrópicas (NovaezRamirez et al. 2011).
Los piretroides son productos de baja toxicidad para los mamíferos respecto a la muy alta toxicidad para artrópodos. Esta toxicidad diferencialse debe, entre otras causas, a que los canalesiónicos sobre los que actúan en artópodos serían2000 veces más sensibles a estas drogas queaquellos de los de los mamíferos. Sin embargo,pueden a ciertas dosis, provocar intoxicacionescrónicas y muerte en seres humanos (Bradberryet al. 2005) por lo que su uso en ambientes habitados por humanos debe ser cuidadoso.
En Argentina tras la fumigación de casas con piretroides para el combate de la “vinchuca” (Triatoma infestans: Insecta: Hemíptera: Reduvidae) vector del Tripanosoma cruzi, agente causal dela Enfermedad de Chagas, se observó un efectoexcitatorio sobre los escorpiones (Gurtler et al.1993; Chandre et al. 2000), provocando mayorfrecuencia de su aparición en los lugares habitadospor humanos, aumentando el riesgo de picaduras. La fumigación sobre T. stigmurus, mostró unefecto dispersivo sobre la población de escorpiones sin mostrar una reducción en su número(Nunes et al. 2000; Ribero de Albuquerque et al.2009), aumentando por lo tanto la problemática.El control entonces, evidentemente se torna imposible mediante este método como única herramienta. Basta decir que las autoridades oficialesde países con gran experiencia en el combatedel escorpionismo y con quienes compartimosparcialmente escorpiofauna, como Brasil, dicentextualmente: “Es necesario controlar las poblaciones de escorpiones por el riesgo que estosrepresentan para la salud humana ya que su erradicación no es posible ni viable. Sin embargo, elcontrol puede disminuir el número de accidentesy consecuentemente la morbimortalidad” (Minis-tério da Saúde 2009). En el mismo manual parael control de escorpiones, se dice expresamenteque el control químico no funciona. Textualmenteindican: “el hábito de los escorpiones de protegerse en grietas y fisuras de paredes, debajo decajas, cartones, pilas de ladrillos, telas, maderas,grietas y hendiduras del suelo, conjuntamente consu capacidad de permanecer meses sin moverse,torna el tratamiento químico ineficaz” (Ministérioda Saúde 2009). A lo mencionado hay que sumarlelas características biológicas de los escorpionestales como su capacidad para mantener sus estigmas respiratorios cerrados por mucho tiempo,lo que torna ineficaz la aplicación de los productos que habitualmente se utilizan para “fumigar”(Polis 1990). Por estos motivos las autoridadesnacionales no recomiendan la “fumigación” comouna forma de combatir escorpiones, si antes no sehan realizado previamente otro tipo de medidas,como las mejoras edilicias tendientes a impedirel ingreso de estos a los ambientes habitados(Ministerio de Salud 2011).
La aplicación de productos de higienización doméstica compuestos por formaldehidos, cresoles y para-cloro-bencenos y de productos usadoscomo insecticidas, raticidas, mata cucarachaso repelentes del grupo de los piretroides y orga-nofosforados no son recomendados como unmétodo de control de escorpiones (Ministério daSaúde 2009). El motivo es que estos productospodrían ser causa de la movilización de los escorpiones a otras zonas, aumentando el riesgode accidentes. Por otro lado, la utilización de estetipo de productos, brindaría una falsa sensaciónde seguridad, lo que puede llevar a pensar que elproblema se resolvió y se descuiden las medidasambientales necesarias.
La efectividad de los productos químicos para poder controlar las poblaciones de escorpionesen condiciones de campo no ha sido establecidacientíficamente. Independientemente de lo enunciado por los productos que se liberan al mercado,o que sugieran quienes los aplican, no existenexperimentos confiables sobre la utilidad de este tipo de productos para eliminar escorpiones.En áreas de riesgo sanitario prioritario en las quese deben aplicar insecticidas para el control devectores (dengue, malaria, Chagas, etc.) hay querecordar que su aplicación puede aumentar la probabilidad de accidentes con escorpiones debidoal efecto irritante de esos productos que provocanla movilización de escorpiones, la eliminación desus fuentes de alimento (cucarachas, grillos, etc.)y al alejamiento de sus predadores (aves, reptiles y algunos mamíferos). Incluso cuando pordeterminadas circunstancias se sugiere fumigarpara disminuir la carga de escorpiones, quienessugieren esto a su vez afirman que una fumigación eficiente no debe ser considerada como unamedida radical, dado que independientementede la imposibilidad de llegar a todos los reductosde escorpiones según se comentó antes, una vezfinalizadas, los escorpiones y otras “plagas” domésticas regresarán. Esto es ya un hecho históricoen lo referente al combate de escorpiones: la mejorgarantía contra los escorpiones es la construcciónde viviendas que tornen inadecuada la vida deestos arácnidos, recomendaciones hechas unsiglo atrás por Ezequiel Dias (Dias et al. 1924),cuyos lineamientos siguen siendo recomendados hasta el presente (Ministério da Saúde 2009).Por todo lo antes mencionado, es muy importanteque los agentes de salud no realicen recomendaciones de fumigación sin antes tomar accionesambientales (Ministério da Saúde 2009; Ministeriode Salud 2011).
Pesticidas. Posibles repercusiones de la fumigación contra escorpiones en la salud.
Dentro de los plaguicidas más utilizados para el control intra o peridomiciliario de artrópodos, seencuentran los piretroides, carbamatos y orga-nofosforados, siendo estos dos últimos de usoexclusivo peridomiciliario.
Los productos utilizados frecuentemente para combatir artrópodos se muestran en la Tabla 1.Si bien en orden de peligrosidad para el ser humano, los organofosforados revisten mayor riesgoque los piretroides, ninguno es inocuo a la horade fumigar. Por lo tanto, es de vital importanciaconocer las posibles consecuencias sobre la saludque pudiesen generar, a fin de planificar la mejorestrategia para disminuir la población de escorpiones y al mismo tiempo tomar los recaudosnecesarios para disminuir las posibilidades deintoxicación de los expuestos a estos productos.Los insecticidas anticolinesterásicos, los mayormente utilizados, están constituidos por dos familias diferentes, organofosforados y carbamatos,que fueron los insecticidas alternativos menospersistentes, no bioacumulables para el controlde artrópodos respecto a plaguicidas utilizadoscon anterioridad.
Existen factores que limitan la actividad de los insecticidas, que incluyen la dosis inicial, la naturaleza de la superficie rociada, la potencia delinsecticida en relación con su tiempo, las condiciones de almacenamiento y las condicionesambientales como humedad y temperatura. Eltipo de sustrato, en términos de su porosidad, esde importancia particular. En superficies porosascomo barro, el insecticida depositado parece perder actividad con más rapidez que en superficiescomo tableros de madera, cerámica y azulejos. Enlos piretroides, la interrupción química se puededar también en superficies altamente alcalinas yen las superficies expuestas a la luz del sol (Palomino et al. 2008).
Los plaguicidas autorizados en la Argentina por la Administración Nacional de Medicamentos,Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT 2018)y los plaguicidas de la denominada línea jardín,autorizados por el Servicio Nacional de SanidadAnimal (S.E.N.A.S.A.), disponibles en los comercios varían en sus presentaciones, concentracióny modos de aplicación. Dentro de los productos ofrecidos para “combatir a los alacranes” seencuentran los siguientes, que pueden causardiferentes efectos en los humanos expuestos.
Piretroides
Los piretroides derivan de las piretrinas. Las pi-retrinas son compuestos naturales que tienen propiedades de insecticidas. Los piretroides sonsustancias químicas de síntesis, con estructurasmuy parecidas a las piretrinas pero en generalmucho más potentes. Se han desarrollado másde 1.000 piretroides sintéticos.
Son productos de menor toxicidad para el humano y animales domésticos respecto a los an-ticolinesterásicos, pudiéndose utilizar de forma intradomiciliaria. Sin embargo, deben emplearsecon los recaudos necesarios dependiendo de laconcentración del producto y la forma de aplicación. Se absorben bien de forma oral, cutánea e inhalatoria. Se encuentran en varias presentaciones como aerosoles, líquidos, pastillastermo-vaporables, espirales, bombas fumígenas,etc. Pueden encontrarse formulaciones con dospiretroides o en conjunto con un organofosforadoo con sinergistas como el butóxido de piperonilo,que disminuye su metabolización aumentandosu toxicidad. Son ampliamente utilizados y entreellos se pueden mencionar a la Deltametrina, Te-trametrina, Permetrina, D-aletrina, D-tetrametrinay Alfa-Cipermetrina, Cifenotrina, Lambdacialotrina,Bifentrina, Etofenprox, D-Fenotrina y Praletrina.Todos son insecticidas de uso extendido, que seusan también para el control de arácnidos. Pueden persistir en el ambiente hasta 10 días. Sonliposolubles, se absorben principalmente por víadigestiva, seguida por la inhalatoria y en menormedida por vía dérmica. Al presentar un metabolismo rápido (hidroxilación y conjugación) poseenbaja toxicidad para los mamíferos. Actúan a niveldel sistema nervioso central (SNC) prolongandola activación de los canales de sodio voltaje dependiente, generando descargas repetitivas (los Tipo 1) o manteniendo abierto dicho canal pormás tiempo (los Tipo 2), prolongando de estaforma la despolarización neuronal (King y Aaron2015). En altas concentraciones se describe además la afectación de los receptores para ácidogamma aminobutírico (GABA) de tipo A. El contacto dérmico puede generar signos y síntomaslocales con irritación e incluso parestesias, asícomo ante el contacto ocular puede haber dolor,lagrimeo, fotofobia y conjuntivitis, y ante la exposición inhalatoria, cuadros de broncoespasmo.Ante ingestas de altas concentraciones puedenpresentarse cuadros neurológicos como temblor,ataxia, coreoatetosis, confusión, convulsiones ycoma (Bradberry et al. 2005).
Dentro de las formas de aplicación se encuentra en auge para el control de artrópodos, la bombafumígena cuya utilización doméstica si bien estáaceptada, debe realizarse con especial cuidadocumpliendo las normas de seguridad al hacerlo,dejando el domicilio por 24-48 horas despuésde su aplicación.
Organofosforados
Son ésteres del ácido fosfórico y sus derivados, liposolubles y volátiles. Se pueden presentar dediversas formas, en su mayoría como líquido (quese encuentra disuelto en un hidrocarburo), comopolvo, emulsionante (disuelto en xileno), aerosoles,cebos, granos, escamas, etc. Son inhibidores de laenzima acetilcolinesterasa (neuronal, plasmática yeritrocitaria) a la que se unen de forma irreversible.La inhibición aguda de esta enzima resulta en unaumento de acetilcolina, resultando en un síndrome colinérgico. El acúmulo de acetilcolina en losreceptores muscarínicos y nicotínicos del sistemanervioso autónomo, sistema nervioso central ysistema periférico produce sobre estimulación delos mismos generando principalmente cambiosen el estado de conciencia, debilidad musculary excesiva actividad secretora de glándulas. Seabsorben por las vías inhalatoria y oral produciendo síntomas inmediatos (Chodorowski et al.2004) (Tabla 2).
Carbamatos
Son inhibidores de la acetilcolinesterasa, pero reversibles. La clínica de la intoxicación por carbamatos es muy similar a la generada por organofosforados, pero de duración más corta (24-48 h)debido a que la inhibición de la enzima acetilcolinesterasa es más inestable, recuperando la enzimasu función. Por ello, si bien puede dar cuadrosde igual gravedad que los organofosforados, su reversión es más rápida, con mejor evolución y pronóstico. Algunos de ellos son: Aldicarb, Car-baryl, Carbofurán, Metomil, Propoxur. (Tabla 1).
Fipronil
Actúa sobre el receptor de GABA. Muy usado también en medicina veterinaria por su baja toxicidad. Puede ingresar por vía oral, dérmica oinhalatoria, tiene como órgano blanco el SNC,actúa bloqueando el receptor para GABA de tipoA, siendo necesarias para generar intoxicación,dosis mucho mayores que las requeridas para elcombate de artrópodos. En intoxicaciones severaspuede presentarse compromiso neurológico conhiperexcitabilidad (Chodorowski 2004), asociadoa diaforesis, náuseas, vómitos, con latencia descripta de aproximadamente 12 horas, pudiendollegar a presentar convulsiones (Fahim 2004).
Abamectina
De la familia de las avermectinas (lactonas ma-crocíclicas). Muy utilizadas como antiparasitarios en medicina veterinaria. Estimula los receptoresde GABA en el SNC. Las intoxicaciones son pocofrecuentes, pero potencialmente fatales. Presenta un amplio margen de seguridad. Cuando seproducen las intoxicaciones pueden presentarsenáuseas leves, vómitos, diarrea y debilidad y engraves, midriasis, vómitos, temblor, ptosis y confusión, pudiendo presentar insuficiencia respiratoria, convulsiones y coma, su vía de ingreso esprincipalmente oral pero puede presentarse porvía cutáneo-mucosa (Aminiahidashti et al. 2014).
Imidacloprid
Plaguicida nicotinoide, considerado de riesgo moderado, con buena absorción por todas las vías, presenta agonismo por receptores de acetilcolinade tipo nicotínico, pudiendo generar interferenciacon la transmisión de impulsos. La estimulacióndel receptor afecta tanto al SNC como al sistema nervioso autónomo, estando descriptos mareos, somnolencia, desorientación, sudoración,midriasis, taquicardia e hipertensión, pudiendopresentar isquemia miocárdica, arritmias y comaen las intoxicaciones severas (Munde etal. 2017).
Existen distintas clases de productos, muy variados, que ciertamente pueden matar alacranes, mayormente ante el contacto directo, si bien también, en muchos casos, por su poder residual. Sinembargo, se debe tener en cuenta que su uso noelimina por si solo a los escorpiones y su uso enparticular repetido y sin control puede traducirseen cuadros de intoxicación.
Control biológicoEl uso de predadores puede ser una herramienta útil para el control de varias especies de escorpiones, entre ellas de Tityus. Los escorpiones poseenvarios enemigos naturales como lechuzas, zorros,zorrinos, comadrejas, armadillos, anfibios, monos,murciélagos, algunos roedores, arañas, lagartijasy otros animales domésticos como gatos y avesde corral como gallinas, patos y gansos. En esteúltimo caso pueden ser de mucha utilidad paracombatirlos y eliminarlos de parques, jardines yperidomicilio.
Como ejemplo de mamíferos predadores de escorpiones puede citarse al ratón saltamontes (Onychomys spp.), en el norte de América, quetendría resistencia a la neurotoxicidad sistémicadel veneno de Centruroides, si bien no así al dolorque causa el mismo (Rowe et al. 2006).Tambiénse observó que los murciélagos de orejas grandes del norte de África (Otonycteris hemprichii)son predadores naturales de escorpiones y quetambién tendrían resistencia a su veneno (Hol-deried et al. 2011).
Respecto a la predación por arañas, la interacción entre Centruroides y Brachypelma vagans (Arach-nida: Araneae: Migalomorphae: Theraphosidae)se ha sugerido para el control de Centruroides,dado que no se encontraría a estos escorpionesen los poblados en donde esta araña, no agresiva, está presente en cantidad. Existen ademásestudios experimentales realizados con estasespecies que apoyarían esta posibilidad (Dor etal. 2011), si bien en observaciones personalesde algunos de los autores llegan a observarseBrachypelma y Centruroides en diferentes lugaresde una misma construcción (Adolfo R. de Roodt,observación personal). También en experienciade los autores, se hallan escorpiones atrapadosen las telas de arañas del género Pholcus (“patonas”) y Steatoda (“falsa viuda negra”), en formaregular, en construcciones en las que convivencon Tityus. En este último caso recientementese ha descripto la predación de T. trivittatus porSteatoda triangulosa (Faúndez y Albornoz 2017).Uno de los mayores predadores de escorpionesen zonas áridas del sur de Sudamérica son laslechuzas de las vizcacheras Athene cunicularia(Carevic et al. 2013; Guerrero et al. 2017) queencuentran en los escorpiones de buen tamañode esta zona, una parte importante de su dieta.También en nuestro país ha sido citada la predación de escorpiones por parte de lagartijas delos géneros Liolaemus (Fulvio-Pérez et al. 2010)y Homonota (Fulvio-Pérez y Minoli 2014), lo quehace muy factible pensar la predación de juveniles de T. trivittatus por los geckos insectívorossinantrópicos, Tarentola mauritanica, introducidosen la Ciudad de Buenos Aires. Debe señalarsesin embargo, que algunos escorpiones en otraslatitudes pueden a su vez predar lagartijas.
Las aves de corral domésticas podrían ser un método de control para este tipo de arácnidos en el peridomicilio. En Brasil se realizaron experienciasdistribuyendo gallinas para eliminar los escorpiones de los peridomicilios, pero los resultados nose pudieron evaluar adecuadamente (SpirandeliCruz et al. 1995). Si bien las gallinas desplieganla mayor actividad durante el día duermen de noche mientras que, inversamente, los escorpionesdesarrollan actividad nocturna. La búsqueda deartrópodos o lombrices por las gallinas o patosdurante el día hace que puedan hallar escorpionesque están bajo piedras, en grietas o hendidurasde la tierra, o bajo hojas u otro tipo de objetosdonde los escorpiones pueden refugiarse. Hayque mencionar que las gallinas no son inmunes alveneno de los alacranes, sin embargo raramenteestos llegan a picarlas cuando son encontradospor ellas. Otra opción para el combate, es el usode patos o gansos que, por la estructura de supico, estarían más protegidos del aguijoneamientopor escorpiones.
Este tipo de control, obviamente no sería aplicable en las grandes ciudades en las cuales la mayordensidad de escorpiones se observa en edificaciones grandes y preferentemente antiguas, enlas que los alacranes encuentran un ambienteóptimo para su supervivencia.
En muchos medios de difusión masiva se sugiere (o afirma) que los felinos son resistentes al venenode alacranes. No existe ninguna evidencia toxi-cológica para afirmar esto. Tal vez la habilidad delos gatos para enfrentarse y capturar diferentespresas puede ser la razón para esa afirmación.Una observación realizada durante la búsquedaactiva de escorpiones por los autores, fue queen los lugares en que cohabitaban gatos y escorpiones, estos últimos no se localizaban en losmismos niveles de altura que en otros lugares deesas mismas edificaciones, sino a niveles muchomás elevados (de Roodt 2014). Si bien esto es solouna observación, es una observación sugestivadel papel de la presencia de gatos y de escorpiones conjuntamente. Sin embargo, a pesar dela habilidad de los gatos para cazar escorpiones,debemos decir que en los lugares mencionadosen los que no se observaban escorpiones a niveles inferiores, sí se observaban huesos de gatos,lo que también es sugestivo. Aunque los gatospuedan tener habilidad para su captura, no soninmunes a sus venenos, siendo sensibles al veneno de estos (Animal Poison Control Center 2019;Arizona Poison Center 2019), por este motivo nose sugiere el uso de gatos domésticos como unmétodo de control de escorpiones.Recientemente investigadores de la Universidadde Córdoba han intentado utilizar nematodosparásitos como Steinemema rarum (Cepa OLI),como medio de control contra T. trivittatus, conresultados experimentales alentadores (Dr. CamiloMattoni, Comunicación personal; Huespe 2017);sin embargo su utilización práctica en ambientesurbanos parece de difícil implementación y es untema que debe seguir investigándose.
En muchos medios de comunicación se ha sugerido el uso de lavanda y otras plantas aromáticas como medida de control, o como una forma de ahuyentar escorpiones. Sin embargo hasta elmomento no existe ningún estudio científico queapoye su efectividad como medida de control.
Localización y captura activasEsta es una práctica muy utilizada para la obtención de escorpiones para obtener su veneno o investigación, utilizándose también para disminuirsu población en lugares infestados.
El hallazgo de estos animales en ambientes urbanos es complicado. A pesar de la ventaja para su hallazgo que representa su fluorescencia ante laluz ultravioleta, que permite su rápida localizaciónen la obscuridad, el tipo de hábitat que ocupan(túneles, cámaras, cañerías, grietas y oquedadesde paredes y pisos, entretechos y entrepisos, etc.)torna a esta característica de menor utilidad quecuando se la aprovecha en capturas a campo. Sibien la búsqueda y captura activa, pueden brindaralgunos resultados cuando se combinan con otrosmétodos, en el caso de los escorpiones sinan-trópicos, en especial en grandes edificaciones oedificaciones antiguas, esta modalidad se tornaimpráctica, por lo que no es recomendable comométodo único de control. En nuestra experiencia,la búsqueda activa y captura no brindan buenosresultados como única modalidad de control.
El muestreo directo con luz UV puede resultar eficaz para estudiar el estado de las poblaciones de escorpiones y para comprobar la presencia de losmismos, o sus restos, en lugares determinados.Los escorpiones emiten una fluorescencia de color“cian-verdosa” a una longitud de onda entre los 440y 490 nanómetros. Cuando mudan su cutícula, noes fluorescente pero poco a poco esta cutícula vaadquiriendo la capacidad fluorescente debido a lapresencia de dos compuestos, la p-carbolina y la7-hidroxi-4-metilcumarina, que se van degradando a medida que emiten la fluorescencia. Ambasmoléculas se encuentran en la cutícula y actúancomo colectores de fotones, “transformando” laluz ultravioleta en cian verdosa. Figura 3.
Hay que tener presente cuando se realiza la búsqueda, que el no-hallazgo de ejemplares no debe ser considerado como una evidencia de su ausencia, debido a lo difícil de su hallazgo.
Medidas de prevención en casas y edificiosTodas las medidas de este tipo deben ser dirigidas a evitar el contacto hombre-escorpión. Son especialmente útiles y en ocasiones las únicasaplicables en los edificios grandes y en construcciones antiguas, donde la utilización del controlquímico y otras modalidades no brinda buenosresultados, o donde fuese imposible su aplicación(espacios habitados, industria alimenticia, salasde hospitales, etc.).
Hay que tener muy presente que la eliminación total de escorpiones en este tipo de construccioneses casi imposible, ya que se localizan en sótanos,cañerías, galerías subterráneas, oquedades deparedes, grietas de paredes o túneles, túneles ycámaras subterráneas y todo tipo de construccióno hábitat generado antropogénicamente adecuado para ellos (basureros peridomiciliarios, pilas odepósitos de materiales como maderas, ladrillos,hojarasca, etc.). En estos lugares están protegidosde la mayoría de sus predadores (incluido el serhumano) y encuentran alimento abundante. Portodo ello, eliminarlos totalmente con los mediosdescriptos si posible, sería extremadamente dificultoso. Para su control, debe antes que nada, impedirse su ingreso a los lugares habitados porhumanos, recién tras lo cual, se deben evaluar lasformas adecuadas para disminuir su población.Son fundamentales la reparación de grietas yoquedades en los pisos y paredes, revoque delas paredes preferentemente liso debido a quelos escorpiones no pueden subir por superficiesbien lisas (Bravo-Becherelle y Arizmendi 1967),la reparación de cañerías rotas, la adecuación dedepósitos de basura y eliminación de artrópodosque pudiesen servirles de alimento. El aseo diarioy empleo de tapas sanitarias, rejillas de trama fina,protecciones en desagües o cañerías de drenaje,burletes en las puertas y ventanas, uso de telatipo mosquitera, etc., son medidas que debentomarse antes de pensar en la implementaciónde cualquier otro método de control.
Hay que recordar que los alacranes no solo pueden ingresar por grietas, agujeros o rejillas, sino pordesagües, por lo que protecciones adecuadas enéstos y tapones en piletas y bañaderas, debenser considerados dentro de las herramientas decontrol.
En los casos de nuevas edificaciones en áreas donde habitan escorpiones, se deberían contemplar lineamientos edilicios que impidan el ingresode escorpiones a los ambientes habitados, asícomo la eliminación de estructuras arquitectónicas que pudiesen favorecer su establecimientoo dispersión tales como pisos con cámara deaire, sobretechos, túneles o cañerías o cámarasde difícil acceso.
En el peridomicilio, patios, jardines, fondos de casas, parques, deben eliminarse los elementos en desuso, desmalezar y retirar todo tipo deescombros, maderas, ladrillos, etc.
Con estas medidas se tiende a impedir que los escorpiones puedan acceder a los ambientes habitados por humanos. Son las únicas medidasque pueden evitar el contacto hombre-escorpiónsobre todo en edificaciones antiguas, en las queestos arácnidos pueden hallar muy numerososnichos para vivir y reproducirse.
En zonas periurbanas, rurales o semi-rurales, en especial las del norte del país, pueden ser de utilidad las sugerencias de la Norma Oficial Mexicana(Secretaría de Salud 2002) para el control, tomandomedidas como aplanar y resanar techos, pisosy paredes, encalar las cercas, paredes y árbolespróximos a las viviendas, instalar cielos rasos(tela, polietileno expandido, etc.) en los techosde materiales naturales (techos de paja u otrosproductos naturales). También se recomienda lacolocación de mosquiteros (alambre o plástico)en puertas y ventanas. En los exteriores de la vivienda pueden servir los zócalos de 15 a 30 cmde metal galvanizado, azulejos o cemento pulido,ya que como antes se mencionó, los escorpionesno pueden subir por superficies lisas.
A diferencia de muchas arañas que poseen distintas estructuras en las patas, como el fascículo subungueal o la escópula, que les permiten trepar superficies perfectamente lisas como vidrio(Niederegger y Gorb 2006), los escorpiones sólopueden trepar superficies que presenten algúntipo de rugosidad, ya que sus tarsos ventralmentesólo presentan distintos tipos de setas y espinas,pero no poseen ningún tipo de estructura de adhesión (Prendini 2001). Solo las crías (ninfas 1)poseen adaptaciones para poder mantenerse enel lomo de la madre, adaptación que pierden alavanzar en sus estadíos.
No se deben acumular escombros, maderas, tabiques, basura, muebles o aparatos inserviblesen el domicilio y peridomicilio, dado que estospueden constituirse en ámbitos adecuados paralos alacranes. También en estas zonas, cuandohubiese alacranes de importancia médica, sedeberían evitar árboles y arbustos en la periferia y cerca de la casa o en su defecto cortar lasramas que ingresen o toquen la vivienda. Eneste caso una buena opción es la utilización demétodos combinados, de los que se habla en elsiguiente capítulo, por lo que también se podríafumigar dos metros alrededor de la vivienda yhasta un metro en la periferia de esta. En el nortede Argentina por las altas temperaturas y características generales climáticas y ambientales,especies sinantrópicas como T. tnvittatus o T.confluens pueden hallarse no solo en el domiciliosino también comúnmente en los peridomicilios,dónde el control químico puede ser de utilidadpara reducir el número de escorpiones (Secretaría de Salud 2002).
Es muy importante la concientización de la población y autoridades para tomar estas medidas en las diferentes edificaciones en las zonas es-corpiónicas. En aquellos lugares en que no setoman este tipo de medidas, la efectividad delas labores generales que se realicen en la zonadisminuirá y habrá mayor posibilidad de encuentrohumano-escorpión.
Ante la presencia cierta, y mientras se implemen-tan las medidas ambientales, es importante tomar medidas como limpiar y despejar los pisos, revisar el calzado antes de colocárselo, sacudirla ropa, no dejar sábanas o colchas que toquenel piso para evitar que los escorpiones suban alas camas o cunas. En casos de alta infestacióny mientras se toman las medidas de prevencióny control, pueden ponerse las patas de las cunaso camas dentro de envases de plástico lisos o devidrio, o rodear a estas con tela autoadhesiva lisa,ya que, como se mencionó, los escorpiones nopueden trepar por superficies lisas como vidrioo metal o plástico liso y limpio.
La conducta personal, también es muy importante en la prevención, las mejores modificaciones ambientales y edilicias no serán de mucha utilidad sino consideramos medidas básicas como caminardescalzo o introducir las manos en cañerías uoquedades sin protección".
Métodos combinadosLa utilización de métodos combinados es la mejor herramienta para el control racional de las poblaciones de alacranes de importancia médica.En urbanizaciones con construcciones residenciales, sin grandes edificios, las medidas ediliciascombinadas con el control químico en el interior yexterior de la vivienda, podría ser de utilidad paramantener los domicilios y peridomicilios libres deescorpiones.
En el caso de las grandes ciudades con grandes edificaciones y edificios antiguos, la adopciónde medidas edilicias a fin de reducir el contactohombre-escorpión es la mejor opción. El controlquímico en esta instancia brindaría algo de utilidadsolamente tras adoptar las primeras medidas,pudiendo disminuir las poblaciones de estos arácnidos ya sea por el contacto con los productoscomo por la disminución de las especies quepueden servirles como alimento, e indirectamente por la ingestión de alimentos con residuos dequímicos en sus tejidos. Por ejemplo, en nuestrolaboratorio notamos cuando se alimentan escorpiones con cucarachas, sin signos de intoxicación pero obtenidas de ambientes en los que seusaron productos para matarlas, una mortalidadque no sucedía cuando los escorpiones eran alimentados con cucarachas criadas sin exposicióna productos insecticidas, en este caso puntual,piretroides. Si bien esto no es algo que se hayademostrado científicamente, es una observaciónsugestiva. Respecto a la relación entre las cucarachas y escorpiones, algunos trabajadores deobras subterráneas en la Ciudad de Buenos Aires, hace décadas, mencionaban como indicadorde la presencia de escorpiones, la ausencia decucarachas en los túneles. Siendo las crías lasde cucarachas una de las principales fuentes dealimento de los Tityus en esta Ciudad, la relaciónsuena lógica, si bien debe tenerse en cuenta quelas fuentes de alimento de los escorpiones pueden variar en las diferentes regiones.
También debe tenerse en cuenta que los escorpiones poseen un metabolismo que les permite permanecer sin comer por periodos muy prolongados (Gonzaga Pimenta etal. 2019), que puedenextenderse varios meses, por lo que el control através de la disminución de sus fuentes de alimento, si bien es útil, tampoco puede considerarseuna medida definitiva.
Las medidas de control combinadas entonces, dependerán de la zona del país, las especies deescorpiones y el tipo y uso de construccionesen los que estos se encuentren. En depósitos demateriales, oficinas y fábricas, el combate y lasmedidas de prevención son mucho más fácilesde tomar que en las viviendas particulares, escuelas u hospitales, en dónde muchas de estasmedidas se ven dificultadas o se torna imposibleimplementarlas (por ejemplo sectores pediátricoso de cuidados intensivos en hospitales, etc.).Inicialmente la búsqueda activa para ubicar lossitios donde podrían encontrarse o ingresar losescorpiones a los domicilios sirve para disminuirel riesgo de picaduras. En este caso quien realiza la búsqueda debe ser personal calificado o almenos estar instruido sobre la forma adecuadade capturar a estos arácnidos (de Roodt 2007).Esto disminuirá transitoriamente la posibilidadde accidentes, sin embargo la ausencia de medidas adicionales no brindará ninguna solución.Ubicar esos lugares, puede ser muy importantedado que los alacranes pueden ingresar a lasviviendas o construcciones a partir de baldíos ocasas abandonadas mediante grietas o cañerías.En ocasiones la aparición de escorpiones puedeverse incrementada por reformas edilicias en lamisma casa, en casas vecinas, en el edificio o porconstrucciones de edificios en las cercanías dellugar problemático. Esto también debe ser considerado. Una vez localizados los lugares dóndese encuentran y retirados, se deben aplicar lasmedidas edilicias que correspondan para evitar elcontacto hombre - escorpión. Tras esto, se puedecombinar la utilización de algún producto paradisminuir su provisión de alimento. Sin embargo,se debe tener presente que en el caso de T. tri-vittatus y T. confluens, la medida de control másimportante, es la referida a las acciones tomadassobre el ambiente, pudiendo utilizarse el controlquímico, solamente después que estas se hayanllevado a cabo. Es importante recalcar eso, dadoque de otra forma no solo no se obtendrán buenosresultados, sino que se aumentará el riesgo decontacto con escorpiones y accidentes.
Evaluación de las medidas de controlEs frecuente (lamentablemente) que se tomen medidas sin evaluar su impacto o hacerlo cualitativamente enunciando como resultado de lasmedidas frases como: “hay menos que antes” o“aparecen - se encuentran más espaciados”, etc.Esto evidentemente no tiene utilidad al momentode poder evaluar el impacto de las medidas quese toman a fin de tomar medidas correctivas sifuese necesario.
A fin de poder entender el éxito o fracaso de las medidas implementadas y evaluar la necesidad decambio de estrategias de control deben utilizarseíndices como los de Infestación (casas donde sehallaron escorpiones / casas revisadas), Intensidado hacinamiento (número de escorpiones encontrados / casas donde se encontraron escorpiones) yde densidad (número de escorpiones encontrados/ número de casas examinadas) (Secretaría deSalud 2002; Ministério da Saúde 2009).
Comentarios finalesEn Argentina las picaduras por escorpiones son conocidas por los servicios de salud desde hace décadas, particularmente en las provinciasdel noroeste y noreste del país. Pero recién enla década del 90 es cuando comienzan a ser registrados cuadros de envenenamiento gravesy muertes de niños (de Roodt et al. 2003). Losaccidentes y óbitos han aumentado y se han extendido a otras regiones del país (sobre todo enlos últimos años) aún en provincias donde loscasos por escorpionismo eran históricamenteleves (Evangelista et al. 2003 a y b; Piola et al.2003, 2004, 2006; Docampo y Fernández 2011;Ministerio de Salud 2011).
En respuesta a esta realidad, a partir de los primeros casos graves registrados, Argentina comenzó con la producción nacional de un antídoto anti-T. trivittatus, puesto que solo se contaba para eltratamiento de los envenenamientos por Tityus(de Roodt et al., 2003), con el antiveneno Antia-racnídico Polivalente, producido por el InstitutoButantan de Sao Paulo, Brasil, que hoy se sigueutilizando en Brasil para tratar los envenenamientospor escorpión. Este antídoto es producido a travésde la inmunización de equinos con veneno de T.serrulatus, también es efectivo para el tratamientode los accidentes por T. trivittatus (de Roodt et al.2003; Ministerio de Salud 2011; de Roodt 2014). Adicho antiveneno, luego se le sumaron los elaborados por otros laboratorios brasileños (antivenenos anti-escorpión de la Fundación Exequiel Diasy del Instituto Vital Brazil), que también puedenser utilizados. Esto es debido a que la principaltoxina del veneno de T. serrulatus (inmunógenoutilizado para la producción de los antivenenosbrasileños) posee una homología estructural del95% con la del veneno de T. trivittatus (Coronaset al. 2015; de Roodt 2015).
A nivel mundial se considera que aproximadamente el 10% de los casos de envenenamiento por escorpión, requieren tratamiento (Chippaux yGoyffon 2008; Khatabbi et al. 2011), relación queparecería mantenerse en Argentina (de Roodt 2009).En los últimos años se han realizado campañas yprogramas de instrucción sobre escorpionismo,fomentando la prevención, desde educación parala salud, con la entrega de material bibliográficoimpreso y digital para la comunidad, así como conpublicaciones científicas y comunicando estudiossobre la temática, en reuniones científicas; además de la realización de valiosos proyectos deinvestigación, relacionados con el escorpionis-mo, su diagnóstico, tratamiento y prevención. Sinembargo, aún existe poca información con basetécnico-científica sobre las formas adecuadas deprevenir este tipo de accidente, y cómo controlara las poblaciones de arácnidos responsables.En este escenario, lamentablemente, el uso de lafumigación sigue siendo recomendado en mediosmasivos de comunicación como un método efectivo de “eliminación” de alacranes, procedimientoque hasta en algunos casos es promovido porautoridades sanitarias. Las fumigaciones, a suvez, con bastante frecuencia son exigidas porlos ciudadanos al encontrar un alacrán en el hogar, siendo este procedimiento no adecuado eincluso, como ha sido explicado, como medidade control contraproducente. Recordamos que elcontrol químico se encuentra contraindicado porlas autoridades sanitarias del Brasil, que poseenuna enorme experiencia en el control del escor-pionismo por Tityus, en especial de T. serrulatus,una especie de características sinantrópicas ypartenogenéticas similares a T. trivittatus (Minis-tério da Saúde 2009). Este escorpión tiene unagran capacidad invasiva (von Eickstedt et al. 1996;Lourengo 2003). Por esa razón la fumigación noes recomendada como medida única de controlsegún lo expresado en la Guía de Escorpionismodel Ministerio de Salud de la Nación (Ministeriode Salud 2011).
Sin duda la prevención es la herramienta fundamental para disminuir la morbi-mortalidad por picadura de escorpiones. Siendo fundamentalpara ello, evitar el contacto de los humanos conestos arácnidos, así como el control del crecimiento y dispersión de las poblaciones de alacranes. Para estos fines, la biología de estosartrópodos debe ser entendida correctamente ytenerse real conciencia de su capacidad adap-tativa y de distribución.
El análisis de la situación sanitaria en lo referente a la ocurrencia de accidentes por escorpión, sugravedad, y frecuente hallazgo de estos arácnidosen distintas zonas, su localización y distribuciónespacial, son aspectos esenciales para enfrentaresta problemática. Por ello, instruir a la poblaciónen general e involucrar su participación en lascampañas que se realizan, es fundamental, asícomo la capacitación del personal de salud entodos los niveles (en particular quienes debencomunicar). Esta capacitación debe centrarse enel reconocimiento de escorpiones de importanciamédica, sus características biológicas (referidas alos aspectos sanitarios), sobre las medidas racionales que se deben tomar para impedir o reducirel riesgo de sufrir picaduras por escorpión y encómo actuar en casos de envenenamientos.
En ocasiones se observa la ocurrencia de accidentes en nuevos asentamientos urbanos, cuando se establecen en zonas previamente ocupadas porescorpiones. En estos casos, la recomendacióndebe centrarse en diseñar medidas básicas enlas construcciones para impedir el ingreso deestos animales.
Las muertes debidas al envenenamiento por picadura de alacrán afectan mayoritariamente a niños en todo el mundo (Chippaux y Goyffon 2008;Katthabi et al. 2011) y en muchas ocasiones, lamayor mortalidad se da en poblaciones en lasque hay carencias edilicias y sanitarias, tal comose pudo comprobar en México (Celis et al. 2007).En ese país el mejoramiento de las condicionesde vida, vivienda e higiene, junto a la aplicaciónde políticas sanitarias como el uso rutinario deantiveneno han reducido sensiblemente la mortalidad por este tipo de emponzoñamientos, que eramucho mayor en las poblaciones pequeñas, conlimitaciones al acceso a la rápida atención médicay con condiciones de vivienda facilitadoras delcontacto humano-escorpión (Celis et al. 2007).La disminución de los envenenamientos por picadura de escorpión, puede lograrse con un enfoqueintegral, que debe contemplar medidas adecuadasy efectivas, con base en el conocimiento técnicoy científico, disponible para reducir la posibilidad del encuentro hombre-escorpión y con ellodisminuir la ocurrencia de este tipo accidentes.Si bien la mortalidad y letalidad son menores enrelación a las producidas por serpientes y arañasen Argentina, su morbilidad es la más alta (deRoodt et al. 2017). Actualmente contamos conun antiveneno específico producido por el Estado Nacional y disponible para tratar este tipo deenvenenamientos de manera gratuita, tambiénse provee desde el sistema público de salud información actualizada sobre diagnóstico, clínicay tratamiento de los envenenamiento por escorpiones (Ministerio de Salud 2011). La prevenciónes fundamental y las medidas de control debenser muy sólidas.
Los esfuerzos respecto a las medidas de control de las poblaciones de escorpiones y de prevención del contacto hombre-escorpión, deben estar fundamentadas en datos con bases sólidastécnico-científicas.