SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 issue40AgradecimientoLos ángeles azules author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

  • Have no cited articlesCited by SciELO

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


CELEHIS (Mar del Plata)

On-line version ISSN 2313-9463

CELEHIS  no.40 Mar del Plata Dec. 2020

 

Notas

Nota

Sylvia Iparraguirre1 

1 Unam

Abelardo comenzó la escritura o los apuntes para lo que llamaría Los Ángeles Azules alrededor de 1985. El origen de la idea lo tengo muy presente: durante la dictadura yo, como muchos, dábamos clases, sería mejor decir que “fuimos a parar” a dar clases, a un lugar que resultó siniestro llamado Ilvem-Lectura Veloz. La experiencia surrealista de ese lugar, tratando de enseñar algo a personas de todo tipo y edad, desesperada por trabajar, fueron el origen remoto de lo que en la novela se llama el “Liceo”, lugar educativo al que llega el narrador. Fue sólo la impresión inicial. El peso de la escritura, los personajes, el escepticismo del personaje, que se enamorará de una alumna, Galatea, chica que trabaja en una fábrica de Envases Flexibles y a la noche concurre al Liceo, llevan la idea básica del comienzo y el texto a otra dimensión, a otra significación, casi moral, casi metafísica. El narrador, desempleado, escéptico y sin ninguna esperanza en nada, y menos que nada en el país, va a lograr un puesto docente en el Liceo, dirigido por Gulko y su mujer, la Paraguaya.

El proyecto fue abandonado cuando Abelardo decidió retomar la siempre postergada finalización de Crónica de un iniciado. En los años siguientes se dedicó por entero a ella. La novela apareció en 1991. Durante algunos intervalos, se reencontraba con lo que cautelosamente llamaba “novela” y agregaba algunas líneas, alguna anotación para un capítulo. En sus Diarios, Tomo II, aparecen registrados estos momentos. Pero dudaba; después de Crónica… todo proyecto le parecía superfluo, menor. Hasta que apareció la idea de El Evangelio según Van Hutten(1999), y se dedicó de lleno a ella. Una vez más, Los Ángeles Azules quedó, lejos; postergada. Y, finalmente, inconclusa.

Los dos fragmentos corresponden al comienzo del capítulo uno.

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons