INTRODUCCIÓN
Como resultado de su difusión durante 30 años, la atrazina (2-cloro-4-etilamina-6-isopropilamina-1,3,5-triazina) es una fuente de contaminación y riesgo no despreciable para la salud humana, fundamentado en estudios toxicológicos que la han postulado como disruptor endocrino y teratógeno (Hayes et al., 2003). Además, la atrazina es moderadamente persistente en el medio ambiente (Erickson & Lee, 1989 ), con una solubilidad moderada en agua (33 mg L-1 a 20° C), siendo el contaminante más ubicuo hállado en cuatro cuencas del país (De Geronimo et al., 2014). El efecto residual de atrazina, puede significar en el tiempo un riesgo de contaminación ambiental debido a procesos como la erosión hídrica o eólica, o llu-vias intensas que desplazan al herbicida a cursos de agua superficiales o por trans-porte vertical hacia el agua subterránea.
La degradación de atrazina en el suelo progresa a través de mecanismos químicos y microbianos, cuyos productos de degradación son hidroxyatrazina (ATZ-OH), desetil atrazina (ATZ-DEA), y desisopropil atrazina (ATZ-DIA) respectivamente, dependiendo de condiciones de temperatura y humedad del lugar (Fuentes et al., 2003).
En la provincia del Chaco, cuya superficie agrícola es de aproximadamente 6.279.844 has (Censo Nacional Agropecuario, 2008) durante la campaña 2019-20 se sembraron alrededor de 277.000 has con maíz (MAGyP 2020-2021) y 460.222 has con soja (SISA 2019-2020). Si bien, la atrazina no está registrada como herbicida de barbecho químico para ningún cultivo (aplicaciones fuera de marbete), se han realizado ensayos en experimentales del INTA en la región semiárida en los cuales no hallaron efectos fitotóxicos sobre el cultivo de soja y girasol, con la utilización de dosis bajas y condiciones determinadas de humedad y temperatura (Ustarroz & Rainero, 2011; Nicasio Rodriguez, 2013)
En suelos de la Provincia de Chaco es poca la información generada hasta el momento sobre la persistencia de atrazina y sus productos de degradación. Este trabajo tiene como objetivo evaluar el tiempo de degradación de atrazina aplicada a campo durante la época estival en suelos del sudoeste chaqueño.
MATERIALES Y MÉTODOS
El sitio experimental se compone de un suelo Haplustol Oxico (27º05’20’’S 61º06’20’’O). La zona de estudio se caracteriza por un clima sub-tropical con estación invernal seca. Las temperaturas máximas promedian los 28,1 ºC anuales y las mínimas 14,9 ºC. El promedio anual de precipitaciones es de 946,0 mm con un notable descenso en los promedios mensuales desde mayo a septiembre.
El ensayo de rotaciones fue iniciado en el año 2008 bajo un iseño en bloques completos al azar con cuatro repeticiones, donde el manejo del suelo es bajo siembra directa y los tratamientos fueron: T1) soja continua y T2) secuencia maíz / girasol / sorgo / soja. Se aplicó atrazina (formulado comercial al 50%) en T1 con una dosis de 0,5 L ha-1 (A) durante el barbecho (12/12/2017), y en T2, los momentos de aplicación fueron en pre- siembra y post-emergencia (6/12/17; 2/1/2018 y 26/2/2018), fraccionando la dosis en este último, correspondiéndose a 3, 2 y 1 L ha-1 (A1, A2 y A3) respectivamente. Se optó por fraccionar la dosis de atrazina entre momentos de pre-siembra y hasta los primeros estadios de crecimiento del cultivo de maíz, a fin de prolongar la permanencia del herbicida en el suelo, como así también disminuir el movimiento vertical hacia aguas subterráneas (Hang, et al., 2007). La siem-bra (S) del cultivo de soja se realizó el día 31/12/2017 y de maíz el día 8/12/2017.
Bajo un diseño de muestreo en zig-zag, en cada punto del entre-surco de cultivo se tomaron diferentes estratos de suelo (0-5; 5-10; 10-20 y 20-30 cm de profundidad) cada uno compuesto por 10 sub-muestras . Las fechas de muestreo fueron dos días antes de aplicar (DAA) el herbicida y 2, 4, 6, 8, 10, 12, 14, 16, 30, 45, 60 días después de aplicación (DDA). Posteriormente las mues-tras fueron secadas en estufa de circulación forzada a 30ºC, molidas y tamizadas por malla de 2 mm. La técnica de extracción analítica de atrazina y sus metabolitos en suelo se realizó empleando la metodología descripta en De Geronimo et al., (2015). Las lecturas cromatográficas se realizaron en un cromatógrafo líquido de ultra alta perfor-mance acoplado a un espectrómetro de masas triplecuadrupolo en tándem (UHPLC MS/MS) instalado en el Laboratorio de Plaguicidas de la EEA INTA Balcarce.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Se observó que el impacto de la aplicación del herbicida es inicialmente super-ficial, debido a ello los primeros 5 cm de profundidad permiten visibilizar mayor variabilidad de la concentración respecto a las restantes profundidades (Fig. 1 a y b), (datos no mostrados).
En los tratamientos evaluados pudo detectarse metabolitos de degradación como ATZ-OH, ATZ-DEA y ATZ-DIA permitiendo inferir procesos degradativos químicos y biológicos de la molécula herbicida bajo las condiciones ambientales del sudoeste de Chaco (Tabla 1) independientemente de las dosis y frecuencias utilizadas en ambos tratamientos.
Este comportamiento se debería a que ambos tratamientos recibieron al menos una aplicación anual durante nueve años. El uso frecuente del herbicida atrazina mantiene activa la comunidad microbiana degradadora con alta afinidad por el herbicida (La Cecilia & Maggi, 2016). Además, podemos señalar que el tiempo de degradación estaría influenciado por las altas temperaturas (Liu, J. et al., 2021) y precipitaciones características de la estación estival, facilitando la hidrólisis química (Wang et al., 2014 ).
En el tratamiento T2 se observó la presencia de metabolitos de degradación de origen microbiano (ATZ-DEA y ATZ-DIA) en todas las profundidades, a diferencia de T1, pudiéndose deber a la evolución hacia otros metabolitos o la ausencia de población
microbiana mineralizadora. La atrazina en el suelo podría declorarse, hidroxilarse, hidrodesalquilarse, metilarse, desalquilarse, eliminarse e hidrolizarse para producir ocho metabolitos diferentes, Además, podrían generarse dos conjugados a partir de HA y DIA por hidrólisis y glicosilación adicionales (Liu, J., et al., 2021)
En estratos más profundos el contenido de materia orgánica, temperatura y contenido de agua se reducen (Moreno et al., 2007), disminuyendo la capacidad degradativa e incrementando la persistencia
En el análisis estadístico se observó una relación entre las concentraciones de la molécula parental y la ATZ-OH (R2 = 0.68). La característica de la ATZ-OH es poseer menor movilidad que el herbicida parental que los demás productos de degradación (ATZ-DIA- ATZ-DEA) pudiendo atribuirse a su escasa solubilidad en agua y a una mayor sorción al carbono orgánico del suelo (Hu et al. 2009) que lo hace altamente persistente. Por otro lado, hubo relación entre las concentraciones de los metabolitos de origen microbiano (ATZ-DEA y ATZ-DIA) con un R2 = 0.96.
CONCLUSIONES
Los resultados indican que, luego de cada aplicación: i.- la distribución de atrazina varió con la profundidad, evidenciándose una estratificación del herbicida; ii.- la distribución de atrazina varió con el tiempo, donde en los primeros 30 días desde la aplicación la concentración en la primera profundidad disminuyó progresivamente su contenido en más del 90% .
Estos resultados preliminares demuestran la importancia de generar datos en diferentes condiciones edafo-climáticas. Por lo tanto, en trabajos futuros debemos profundizar en los procesos de sorción y transporte de atrazina así como en la caracterización de la actividad microbiana del suelo, dado que estos son a nuestro entender los primeros datos generados en un suelo Molisol, bajo condiciones de campo y clima sub-tropical con estación invernal seca del sudoeste chaqueño.
AGRADECIMIENTOS:
Este trabajo es un estudio preliminar que forma parte de la investigación científica enmarcado al tema de tesis presentado en el doctorado en Recursos Naturales de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) Corrientes, posibilitado y financiado por becas doctorales INTA CONICET.