Sr. Director:
Se ha estudiado con gran interés el manuscrito de Cerutti y col.1 titulado: “Abordaje laparoscópico del traumatismo abdominal. Experiencia de un hospital de trauma”, que tuvo por objetivo describir la experiencia en laparoscopia en traumatismo durante un período de 4 años, tanto diagnóstica como terapéutica, y evaluar su utilidad. A propósito de ello, nos permitimos mencionar lo siguiente:
Los autores puntualizan que una de las principales limitaciones metodológicas de su estudio fue el carácter retrospectivo y descriptivo de este. En consecuencia, pudieron haber tenido un control deficiente o limitado sobre la recopilación de los datos y las variables y no mencionan posibles controles realizados debido a la posibilidad de sesgos de información inherentes a la recolección y revisión de historias clínicas por parte de los investigadores.
Es importante destacar que se ha descripto que, desde el cambio de milenio, ha mejorado significativamente la capacidad de la tomografía contrastada (TC); esto se refleja en un aumento en la incidencia de líquido libre aislado2, lo cual anteriormente y como lo mencionan los autores de forma precisa en su escrito era considerado como un marcador sustituto de una posible lesión de víscera hueca, requiriendo sin lugar a duda una intervención quirúrgica. Sin embargo, hoy en día debido a estas circunstancias se ha revaluado la importancia del líquido libre aislado y, en contraste con su consideración de reparación quirúrgica inmediata, Bekker y cols.2 optan según su estudio por un manejo conservador y expectante durante un período de 48 horas, ya que hasta el 90% de los pacientes fueron tratados con éxito sin necesidad de cirugía.
Por último, somos conscientes de que los beneficios de la cirugía laparoscópica están bien definidos, pero la aceptación y el reconocimiento en entornos de países de bajos y medianos ingresos siguen siendo limitados por las dificultades de implementación. La laparoscopia de bajo costo debe ser un componente esencial de la investigación quirúrgica rentable e innovadora y la reducción de sobrecostos tanto en atención emergente como en un entorno electivo representará mejores y más sólidos hallazgos3. Consideramos apremiante y oportuno que los autores y la cirugía latinoamericana reconozcan limitaciones de los estudios que realizan, pero además que aporten estrategias mucho más puntuales y concisas para seguir por las instituciones y grupos quirúrgicos que aún necesitan consolidarse.
Jorge A. Castrillón-Lozano y Valeria López-Cardona
Respuesta de los autores
Sr. Director:
En primer lugar, deseamos agradecerle por su interés en el artículo publicado por nuestro grupo sobre la utilidad de la laparoscopia en el traumatismo abdominal.
Con respecto a las características metodológicas del estudio, creemos que los estudios prospectivos tienen mayor validez científica. Sin embargo, el que proyectamos retrospectivamente como revisión de historias clínicas fue realizado de manera consciente y con la colaboración del Departamento de Estadística del Hospital, de forma tal de disminuir la posibilidad de sesgos. De esta manera, incluimos a todos los pacientes que fueron abordados por laparoscopia en ese período de tiempo, no los seleccionamos.
Con respecto a los hallazgos tomográficos de líquido libre sin lesión de órgano sólido, creemos que sería interesante realizar un estudio centrado en ese tema solamente, distinguiendo los hallazgos de traumatismo abierto y cerrado.
El objetivo de nuestro trabajo fue describir nuestra experiencia en laparoscopia en traumatismo, ya que pertenecemos al Hospital de Trauma más grande de la región y la elevada casuística nos permitió contar con un grupo considerable de pacientes. Las conclusiones nos sirven para continuar con las investigaciones y para incentivar a otros equipos quirúrgicos a que utilicen este abordaje de forma segura en casos seleccionados de pacientes traumatizados.
Clara Nair María Cerutti y José María López