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Salud(i)Ciencia

versão impressa ISSN 1667-8682versão On-line ISSN 1667-8990

Salud(i)Ciencia vol.23 no.6 Ciudad autonoma de Buenos Aires out. 2019  Epub 08-Out-2019

 

CRÓNICAS DE AUTORES

Líquido gingival crevicular como marcador diagnóstico en los pacientes VIH positivos

Prachi Atram1 

1 Rungta College of Dental Sciences & Research, Amravati, India

Amravati, India (especial para SIIC)

La obtención de líquidos orales es una alternativa, no invasiva e indolora, a la obtención de suero para la detección de anticuerpos (Ac) contra diversas especies de bacterias, virus, hongos y parásitos. El líquido gingival crevicular (LGC) y la saliva son fluidos corporales diferentes. La saliva total y el LGC difieren por el hecho de que la cantidad de inmunoglobulina (Ig) G en el LGC es varias veces más alta que en la saliva. Sin embargo, se requieren estudios de comparación de saliva total y LGC para determinar la verdadera sensibilidad de la prueba ELISA en este último caso.

Por lo tanto, el presente estudio tuvo por finalidad detectar Ac contra el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) en el LGC mediante ELISA, en correlación con el recuento de linfocitos T CD4 positivos. Luego de su aprobación por el comité de ética, el estudio se llevó a cabo con 37 pacientes VIH positivos (37 muestras de LGC y 10 de saliva) y en 37 enfermos VIH negativos, en el transcurso de 7 a 8 meses, en 2006, en el Government Dental College & Hospital (GDC) de Nagpur. Los pacientes VIH positivos asistían a clínicas de terapia antirretroviral en el GDC. Los controles (sujetos seronegativos) asistieron, de manera voluntaria, a los centros de detección y asesoramiento (Voluntary Councelling and Testing Centre [VCTC]) del Indira Gandhi Government Medical College (IGGMC), Nagpur.

Aunque inicialmente se los consideró posiblemente infectados, los resultados en las muestras de suero fueron negativos. Todos los individuos con sospecha clínica fueron sometidos a estudios en suero para la detección del VIH. Los pacientes VIH positivos se clasificaron según el estadio I, II, III o IV. Mediante el uso de microcapilares descartables de Kimble se obtuvieron por aspiración 74 muestras de LGC en total. Se utilizaron microcapilares descartables, equipos de ELISA, tubos estériles, hisopos de algodón, guantes y máscaras. Los pacientes permanecieron en posición sentada, con la cabeza levemente inclinada. El sitio de la toma se mantuvo seco y aislado. Los microcapilares de color blanco graduables entre 1 y 5 µl se colocaron en el espacio crevicular durante 20 a 25 minutos; se tomaron 5 µl de LGC. Para cada paciente se obtuvieron muestras de LGC y saliva; estas últimas se recogieron en tubos estériles, pidiéndole al sujeto que se inclinara hacia adelante. Las muestras se conservaron a -20 ºC.

El equipo de ELISA HIV-CheX® se utilizó según las instrucciones del fabricante para el procesamiento de las muestras; se utilizó un lector de ELISA a 450 nm y 650 nm en el transcurso de la hora, luego de finalizado el procedimiento completo. Las muestras y los reactivos se consideraron potencialmente infecciosos, motivo por el cual fueron descontaminados con hipoclorito de sodio al 5% durante 30 a 60 minutos, antes de su descarte.

Se observaron diferencias significativas en el recuento de linfocitos T CD4 positivos en el estadio I, respecto de los estadios II, III y IV;

entre los estadios II y III y II y IV, y entre los estadios III y IV.

Las diferencias en el título promedio de Ac no fueron significativas. El título promedio de Ac en los pacientes seropositivos fue de 1.72 ± 0.595, más alto que en los sujetos seronegativos; en las pruebas de la t para muestras independientes, los valores de p fueron < 0.05, de modo que se observaron diferencias significativas entre los grupos. Cuando se compararon las muestras de saliva y LGC, el título promedio de Ac fue 1.737 y 1.780, respectivamente. El título de Ac del FGC y la densidad óptica promedio fueron significativamente más altos que los de saliva. En las pruebas de la t para muestras relacionadas, los valores de la p fueron < 0.05 (p = 0.008), es decir estadísticamente significativos.

El recuento promedio de linfocitos T CD4 positivos en los pacientes seropositivos con manifestaciones orales y sin ellas difirió significativamente (p = 0.011). Solo 12 pacientes (32%) de la cohorte presentaron lesiones orales. El título de Ac en el LGC, respecto del suero, se asoció con sensibilidad, especificidad, valor predictivo positivo y valor predictivo negativo del 100%.

El VIH fue identificado por primera vez en 1983 por Barre-Sinoussi y colaboradores. En 1984, Montagnier y su equipo lo denominaron virus del linfoma/leucemia de células T de los seres humanos (HTLV-III). En 2001, Grassly y colaboradores descubrieron que el VIH se transmite por contacto sexual y sangre o hemoderivados infectados. En 2004, Scarlatti refirió la transmisión vertical de la enfermedad. Las situaciones mencionadas con anterioridad se evitan mediante las medidas de prevención en salud pública, como el rastreo de sangre y plasma de dadores para la detección de Ac contra el VIH y antígeno p24 asociado con el VIH, el tratamiento con calor de los concentrados de factores de la coagulación y el rastreo de los donantes, sobre la base de los antecedentes clínicos; todas estas medidas reducen el riesgo de transmisión del VIH. Incluso así, el sida sigue siendo la quinta causa más común de mortalidad en los adultos de 25 a 44 años.

El principal blanco del VIH es la subpoblación de linfocitos T CD4 positivos, de modo que la infección se asocia con disminución del cociente de linfocitos CD4:CD8. Los conjugados enzimáticos marcados se introdujeron, por primera vez, en 1966 para la localización de antígenos en los tejidos. El método ELISA es la prueba más comúnmente utilizada para el rastreo de la infección por VIH por su metodología relativamente simple, la elevada sensibilidad y la posibilidad de analizar un número importante de muestras, sobre todo de sangre.

Con el avance tecnológico han surgido nuevas alternativas diagnósticas a las pruebas clásicas. Cada una de ellas ofrece ventajas particularmente atractivas, en términos de la simpleza en la recolección, las pruebas y la interpretación de los resultados. Aunque generalmente se utiliza el término “saliva”, el líquido que se utiliza para los estudios es el LGC del bolsillo crevicular, un trasudado de la sangre y, por lo tanto, similar a las muestras de sangre que se utilizan para los estudios serológicos. Mortimer y Parry señalaron que solo se requieren 0.5 mg/l de IgG para detectar, con elevada sensibilidad, la infección por VIH.

En el presente estudio se detectaron Ac contra VIH en el LGC mediante un nuevo sistema, sumamente alentador para el rastreo diagnóstico. En 2003, Goodson sugirió que las sustancias externas no ingresan en el espacio periodontal, de modo que el LGC se considera no contaminado; la concentración de IgG es 100 veces más alta que la de saliva. Actualmente se acepta que el LGC se forma como un ultrafiltrado de la sangre.

Soto Ramírez y colaboradores estudiaron el trasudado gingival crevicular y demostraron sensibilidad, especificidad, valor predictivo positivo y valor predictivo negativo del 99.5%, 100%, 100% y 99.9%, respectivamente. Por otra parte, en el presente estudio, la sensibilidad, la especificidad, el valor predictivo positivo y el valor predictivo negativo fueron del 100%. La especificidad, el valor predictivo positivo y el valor predictivo negativo fueron similares a los de la presente investigación. La sensibilidad y el valor predictivo negativo fueron más altos en este trabajo. Las variaciones en estos valores podrían obedecer a diferencias en los dispositivos utilizados para la toma de las muestras y la metodología aplicada.

En conclusión, el LGC podría ser un medio alternativo al suero porque se lo obtiene de manera no invasiva, indolora y sencilla; se requieren volúmenes pequeños, la relación entre el costo y la eficacia es favorable y las muestras se descartan con facilidad. Los hallazgos en conjunto sugieren que el LGC representaría una muestra más apropiada para el diagnóstico, respecto de la saliva.

Prachi Atram describe para SIIC su artículo editado en Journal of International Society of Preventive of Community Dentistry 5(1):24-30, Ene 2015.

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